Las prendas y objetos de uso frecuente no son de guardar en el armario; por ello, un buen perchero es muy práctico para tenerlos a mano, sin necesidad de abrir y cerrar puertas. Si antes era el recibidor o el dormitorio los lugares por excelencia del perchero, también el aseo y la cocina pueden tenerlo; solo se trata de escoger el que mejor se adapte al entorno.
Los percheros han entrado en el horizonte de los diseñadores de tal modo que hay modelos muy variados: exclusivos, vanguardistas, clásicos, minimalistas…y de materiales muy diversos. Sigue nuestro artículo y verás qué formas tan distintas existen en el mercado; seguro que más de uno te gustará para tu casa.
CLÁSICOS DE SIEMPRE
Los percheros de madera, con un pie, son los de toda la vida; incluso renovados, quedan perfectos entre una decoración clásica o en una vivienda ecléctica. Los hay de todo tipo de terminación: roble, pino, haya. ¿Qué te parece éste?
METÁLICOS
Se han puesto de moda por su robustez y duración; no se corcan ni sufren rozaduras. Además, los acabado en acero tienen un aspecto precioso, muy adaptable a cualquier ambiente. Los de forja se adaptan estupendamente a un ambiente provenzal
PLÁSTICO O POLIURETANO
Éstos que viene a continuación son un diseño de Mario Mazzer; son de poliuretano.
Están reforzados en la estructura para sostener bien el peso y la estabilidad. Muy adecuados para viviendas jóvenes y sencillas.
ARTESANOS
¿Has visto este perchero hecho a mano? Tiene cierto encanto y originalidad. Un perchero artesanal, con formas ideadas por uno mismo y con elementos decorativos escogidos, destaca sobre la decoración, convirtiéndose en una mueble que revaloriza el resto.
VANGUARDISTAS
Nada mejor que un perchero con ruedas como éste, que recuerda a los de las tiendas. Son portátiles, tienen mucha capacidad, y se les puede adosar baldas para colocar objetos